De las 47 termas públicas que hubo en la Hispania romana quedan pocos restos. Las más completas son las termas de Itálica. Éstas tenían los servicios duplicados para que las personas de uno y otro sexo estuvieran separadas. Esto nos indica que son posteriores al decreto del emperador Adriano sobre este asunto.
La misma disposición tienen las termas de Alange, cerca de Mérida, en la provincia de Badajoz. Aquí aprovechaban unos manantiales de aguas termales que aún siguen produciendo un caudal de 316 litros por minuto a una temperatura de 28º C.
No es de extrañar que los romanos construyeran aquí unos complejos termales semejantes a los del Foro de Roma y a las Termas Estabinianas de Pompeya. Todavía se utilizan hoy día dos cámaras gemelas: la de las mujeres, amarilla, y la de los hombres, azul (en la foto)
La misma disposición tienen las termas de Alange, cerca de Mérida, en la provincia de Badajoz. Aquí aprovechaban unos manantiales de aguas termales que aún siguen produciendo un caudal de 316 litros por minuto a una temperatura de 28º C.
No es de extrañar que los romanos construyeran aquí unos complejos termales semejantes a los del Foro de Roma y a las Termas Estabinianas de Pompeya. Todavía se utilizan hoy día dos cámaras gemelas: la de las mujeres, amarilla, y la de los hombres, azul (en la foto)