diumenge, d’octubre 15, 2006

Causas de la industrializacion siglo XIX



En 1833 apareció la industria pionera de Cataluña y de todo el Estado español: el vapor de Bonaplata, accionada por una máquina de vapor. Tuvo una historia breve, solo duró dos años, ya que fue destruido por unos obreros exaltados que veían que las máquinas les quitaban el trabajo, el llamado movimiento del ludismo.

La revolución industrial en España comenzó en tres focos: Barcelona, Alcoy y Málaga, pero solo el primero perdurará y llegará a ser la fábrica de España del siglo XIX.

Así que, a pesar de la oposición del ludismo, Cataluña vivió una experiencia única: la Revolución Industrial, que se concentró en el sector textil, sobretodo en el algodón y la lana.

Las raíces de la industrialización de Cataluña se tienen que buscar en el siglo XVIII.
La revolución agrícola había generado una agricultura comercial y competitiva.
La existencia de una clase media campesina había dado lugar a la articulación de un mercado interior.
La industria rural y las manifacturas crearon una clase media emprendedor y un gran número de trabajadores cualificados.

Y una nueva burguesía se iba abriendo a la innovaciones económicas y tecnológicas que surgían en el resto de Europa.
El proceso industrial nacido en Cataluña siguió un modelo común en toda Europa: en una primera fase se desarrolló la industria de bienes de consumo, especialmente textiles -algodón y lana-; posteriormente, se inició la industria de bienes de equipamiento esperanzada por la gran demanda de las fábricas, de la agricultura y de los nuevos medios de transporte (ferrocarril).